La Divina Comedia, el poema narrativo de Dante explica la travesía a través del infierno, purgatorio y cielo. Durante el Renacimiento el infierno de Dante, cuya forma y tamaño son descritos en el poema, fue objeto de diversas ilustraciones. En 1529 Antonio Manetti, un arquitecto florentino realizó un mapa que fue objeto de numerosas discusiones entre los intelectuales italianos, especialmente los florentinos.
Con su mapa, Manetti inauguró lo que se ha llamado “el tiempo álgido de la cartografía infernal” que se extendió durante dos siglos, desde mediados del siglo XV hasta principios del XVII.
Antonio Manetti, 1529,Piante e Misure dell’Inferno di Dante
Las discusiones sobre la cosmografía de Dante realizada por Manetti hacían aparecer otras versiones impresas ilustrando el poema de Dante que contestaban la de Manetti. Muchos pensadores de la época siguieron esta moda intelectual y debatieron sobre la cosmografía de Dante, ¿cual era la circunferencia del infierno? ¿cuál era su profundidad? ¿donde estaba la entrada?. Incluso Galileo Galilei, en 1588 dio dos conferencias en los que investigaba las dimensiones del infierno y apoyaba los cálculos del mapa de Manetti
Aldus Manutius,
Esta corriente intelectual responde al interés en la nueva forma de representación del mundo que había abierto la Geografía de Ptolomeo, que propiciaba una estética del orden y racionalidad geométrica. Al hacer el mapa del infierno, dándole forma, definiendo su tamaño y situándolo a partir de los detalles descriptivos del poema, intentaban encontrar en el poema de Dante el espejo de su modernidad, de ahí la simetría y la geometría que emplean, que es igual a la empleada en otros mapas renacentistas
Después del Renacimiento, ilustrar el infierno de Dante, ha sido una tradición artística que ha atravesado siglos, artistas del siglo XX como William Blake, Gustave Dore, Salvador Dali, Renatto Guttuso, Tom Phillips, Robert Rauschenberg, o Henrik Olesen han trabajado sobre ello.
No hay comentarios:
Publicar un comentario